Se Garantiza Suministro Sostenible de Material de Siembra de Camote de Calidad

Donantes: Fundación Bill & Melinda Gates

Región: Sub Sahara de África

A medida que el CIP y sus socios producen variedades resistentes y nutritivas de camote y trabajan para lograr que millones de familias africanas las cultiven y consuman,  asegurar que haya suficiente material de siembra de calidad disponible para los agricultores constituye una prioridad y un desafío.
El CIP ha facilitado la creación de cadenas de suministro que abarcan desde los laboratorios de cultivo de tejidos —que propagan plántulas libres de enfermedades de las variedades mejoradas— hasta los multiplicadores descentralizados de esquejes, que multiplican material de siembra para su venta a los pequeños agricultores. Los institutos nacionales de investigación agraria son un enlace fundamental de esas cadenas de suministro, porque son responsables de la liberación de variedades, de la micropropagación de plántulas de cultivo de tejidos libres de patógenos y de la producción de esquejes de camote bajo condiciones de invernadero. Estos esquejes, conocidos como ‘semillas de generación precoz’, son vendidos a los multiplicadores descentralizados que las reproducen para vender material de siembra de calidad a los agricultores. Bajo la iniciativa Camote en Acción para la Seguridad y la Salud en África, (SASHA por sus siglas en inglés), el CIP está ayudando a los institutos nacionales de investigación agraria a satisfacer de manera eficiente y rentable la creciente demanda de material de siembra de camote.

Los agricultores africanos requieren material de siembra de calidad para aprovechar plenamente el potencial del camote como un cultivo de seguridad alimentaria rico en vitamina A.

“Necesitamos asegurar que los agricultores tengan acceso oportuno a semillas de calidad y a las variedades mejoradas. Garantizar un suministro consistente de semillas de generación precoz por parte de nuestros socios nacionales es un importante componente de esto”, dijo Srinivasulu (Srini) Rajendran, economista agrícola del CIP.

Srini explicó que las instituciones públicas de muchos países del sub Sahara africano tienen la obligación de producir material de siembra de calidad pero se ven obstaculizadas por un financiamiento inestable, y la falta de modelos de producción y negocios validados. Para remediarlo, el CIP proporcionó apoyo técnico a los actores del gobierno y del sector privado en 11 países del SSA a medida que iban desarrollando y lanzando planes de negocios para mejorar y sostener la producción y venta de semillas de generación precoz.

El CIP y sus socios están creando cadenas de suministro para asegurar que los agricultores del SSA tengan esquejes de lianas de camote sanos para sembrar.

El CIP brindó apoyo a un equipo de científicos y expertos en finanzas y administración para que trabajaran con la alta dirección de las organizaciones socias en el desarrollo y ejecución de los planes de negocios, lo que incluía componentes técnicos, financieros, institucionales y de políticas. El componente técnico abarcó la creación de capacidades en los procesos de producción para aumentar las tasas de multiplicación, el establecimiento de sistemas internos de control de calidad para las semillas de generación precoz y la programación de la producción para que coincidiera con los programas de siembra de los agricultores. La innovación financiera se centralizó en el establecimiento de un mecanismo de fondo rotatorio mediante el cual los ingresos de la venta de semillas se reinvierten en la producción futura. Esto también requirió cambios en la política institucional y la cultura organizacional.

“El plan de negocios guía a la institución para garantizar que los costos recurrentes de producción puedan cubrirse con el fondo rotatorio al vincular los componentes técnicos, financieros, institucionales y de políticas con el mejoramiento de los sistemas de semillas en general”, señaló Srini.

Margaret McEwan, científica social del CIP, refirió que los científicos usaron el monitoreo en tiempo real para determinar el costo de producción de las semillas de generación precoz en cada instituto nacional de investigación agraria. “Ahora tenemos evidencia del costo real de la producción de semillas de camote de generación precoz en las instituciones públicas. Esto sienta las bases para establecer estrategias de precios adecuadas que aseguren la sostenibilidad de los negocios a mediano plazo”, afirmó.

Srini anotó que si bien algunos institutos de investigación agraria enfrentan desafíos, la mayoría está en condiciones de cubrir sus costos de producción, administrativos y de comercialización con la venta del material de siembra para 2019, cuando finalizará SASHA. “Cuando comenzamos este trabajo en 2014, hubo cero ventas. Ahora, todos los institutos con los que trabajamos están generando ingresos por la venta de semilla de camote pre básica y/o básica, y casi todos están cubriendo sus costos de producción”, subrayó.

El Servicio de Inspección de Sanidad Vegetal de Kenia (KEPHIS)es un buen ejemplo, ya que obtuvo ganancias de las ventas de material de siembra de camote anaranjado en 2017. La Dra. Esther Kimani, Directora General de KEPHIS, explicó que la institución redujo sus costos de producción al tiempo que aumentó la demanda de semillas de camote de pulpa anaranjada de alta calidad mediante avisos en la web, actividades de sensibilización y un esquema de precios variables según el tipo de cliente y la época del año en la que se entrega el material de siembra. Entre 2016 y 2017, las ventas de semillas de calidad de camote anaranjado por parte de KEPHIS aumentaron en 79 por ciento. Además, mientras que KEPHIS vendía principalmente esquejes de camote anaranjado a las ONG antes de 2016, ahora la mayoría de sus clientes son agricultores.

“Esto ha fortalecido el sistema de semillas de camote y la disponibilidad de material de siembra de calidad ofrecido a los productores de este cultivo, mejorando los medios de subsistencia de los agricultores y la seguridad alimentaria de la nación en general”, observó la Dra. Kimani.

De izq. a Der.: Dra. Esther Kimani, Directora General de KEPHIS, Jackson Mandango, Gobernador del condado Uasin Gishu, y la Sra. Florence Munguti, en el invernadero de semillas de camote de generación precoz de KEPHIS. Foto: M.Okanda/KEPHIS

Florence Munguti, funcionaria a cargo de la Estación de Cuarentena de Plantas y Bioseguridad de KEPHIS, donde se producen las semillas de generación precoz, indicó que desde que los altos directivos de KEPHIS vieron los beneficios de realizar el ejercicio de costos como la base de desarrollo de un plan de negocios para la producción de semillas de generación precoz de camote, quieren aplicar el enfoque para la producción de semillas de otros cultivos.
El CIP y sus socios tienen pensado realizar análisis de factibilidad financiera para empresas dedicadas a la producción de semillas de diversos cultivos de raíces y tubérculos. “Esto ayudará a optimizar el uso de las instalaciones y las capacidades de producción”, aseguró Margaret.