La papa es un cultivo muy importante en el Perú para la seguridad alimentaria. Su cultivo ayuda a mejorar la resiliencia, especialmente entre pequeños agricultores. El consumo per cápita del Perú ha crecido de 65 a 85 kg en los últimos 12 años, lo cual indica que cada año hay mayor fuente de ingreso para los pequeños productores de papa. De igual manera, el Perú se ha convertido en el primer productor de papa de América Latina, produciendo más de 5 millones de toneladas de papa al año.

Pese a ser el principal cultivo del país y representar el 25% del PBI agropecuario, al Perú arribaron más de 7 millones de kilos de papas pre fritas en los primeros cuatro meses del 2021. Estas cifras revelan un moderado descenso frente a los cerca 10 millones de kilos importados en igual periodo del año 2020, cuando se reportó una inversión de más de US$ 8 millones. El principal proveedor de papa pre frita en el Perú durante el primer cuatrimestre del 2021 fue los Países Bajos, con colocaciones por encima de los US$ 4 millones. A continuación, se ubicaron Bélgica, Estados Unidos, Francia y Argentina.

Estos datos sirven para demostrar que la industrialización del tubérculo en nuestro país es necesaria y puede tener ventajas comparativas en precio y calidad con los productos importados. Para favorecer la industrialización del tubérculo se han identificado dos futuras variedades de papa aptas para el procesamiento en bastones y una apta para horneado como resultado del proyecto “Selección de clones de papa con aptitud para procesamiento industrial en bastones y horneado, resistencia a la rancha y producción de semilla de alta calidad fitosanitaria” auspiciado por CONCYTEC y financiado por la empresa Minera Poderosa mediante la ley 30309.

En este evento se presentarán las características de las papas que serán liberadas oficialmente como nuevas variedades en la segunda mitad del 2022, de acuerdo con la normatividad peruana vigente. Los nombres de estas nuevas variedades de papa serán: “CIP-Poderosa Crocante” y “CIP-Poderosa Pollera” para las variedades aptas para procesamiento industrial en bastones, y “CIP-Poderosa Watia” para la variedad para horneado.