Brisayda Sicus Palomino – Comunidad de Sacaca, Cuzco, Perú
Nuestros abuelos tenían solamente una manera de preparar las papas: las sancochaban. Con la capacitación, hemos podido variar los platos de papas que preparamos y acompañarlos con otros productos que encontramos en nuestra región. Sé cómo hacer pastel de papa, ensaladas, pero la pizza es mi favorita. Para hacerla usamos un tubérculo relacionado con las papas. Los alimentos que les damos a nuestros hijos los ayudan a estudiar mejor. Poco a poco, estamos reemplazando las pastas y el arroz con productos nativos.
Cuando mi hijo tiene fiebre, uso un tipo de papa nativa para tratarlo. Exprimo el jugo en su boca. Sabe muy amargo pero le quita la fiebre. Las plantas que usamos nos nutren, también nos curan. Puedes usar las papas para los cálculos renales, dolores de estómago. Nos curamos con lo que comemos.
Las papas son muy importantes para nosotros, casi como si fueran nuestras hijas o nuestros parientes. Tenemos que cuidarlas. Nuestros pensamientos están siempre con nuestras papas. En febrero tenemos que preparar la tierra. Luego, después de sembrarlas, comenzamos a pensar qué debemos hacer para cuidar nuestras plantas. Después de la cosecha, necesitamos separar las papas para la siembra, para hacer chuño (un tipo de papa liofilizada), y para la nutrición de nuestra familia.
El clima está cambiando. Las papas no toleran el calor. Las lluvias no son normales. Algunas lluvias traen enfermedades como la llanasoqra (un tipo de tizón de la papa), que afecta a las hojas de la papa. Las vuelve negras y las seca y la papa no crece bien. La enfermedad penetra en el tallo y la papa no es la misma. El sabor es diferente. Podemos usar esas papas para hacer chuño, pero no se recomienda su uso como semilla.